| Justificando lo injustificado de la xenofobia | |
| Por xenofobia podemos entender el miedo irracional consistente para con personas que son extranjeras. Puesto en arroz y habichuela es la manera en que yo competitivamente me relaciono en esta sociedad con el/la otro/a con la intención de joderle. A mi me parece que esta penosa realidad de joder a la/el otra/o, puede ser explicada utilizando los conceptos de prejuicios y discriminación. Prejuicio, el cual puede ser negativo o positivo, es el tener la capacidad de llegar a conclusiones sobre algo o alguien sin la necesidad de examinar datos concretos. Como por ejemplo, los/as Boricua son gente vaga e irresponsables. Este concepto de prejuicio tiene tres componentes los cuales son importantes entender cuando analizamos la xenofobia. Por un lado existe el componente cognoscitivo, o sea, la manera de pensar sobre la gente inmigrante. Por ejemplo, el que se crea erróneamente que los/as inmigrantes son responsables del crimen y desempleo que ocurre en Estados Unidos. Por otro lado, tenemos el componente emocional, o sea, la manera que nos sentimos con estas personas inmigrantes. Por lo general estos sentimientos son activados por estereotipos que se tienen y los mismos reflejan miedo irracional, desconfianza, disgusto, envidia, entre otros sentimientos. Y el último componente lo es el de la acción, o sea, el llevar a cabo conductas discriminatorias contra la gente inmigrante. Como por ejemplo el aprobar nuevas leyes de inmigración las cuales están basadas en la manera de pensar y de sentir de unas personas racistas. Estas nuevas leyes entonces justifican, por ejemplo, el que se organice todo un operativo policíaco para salir a llevar a cabo arrestos o el construir una muralla de odio en la frontera con México que impida dizque la entrada de nuevas/os inmigrantes. Hay que entender que este control legislativo responde a la realidad del modelo dominante-dominados/as el cual dentro del racismo refleja una intolerancia, indiferencia, y hostilidad hacia los/as inmigrantes implantando primeramente un tipo de segregación y luego una expulsión- deportación y por supuesto, la aniquilación. De aquí entonces estos grupos de odio y los crímenes de odio llevados cabo y en donde hasta el día de hoy California y Texas tienen la mayoría de estos grupos de odio y a estos le siguen Florida, Carolina del Sur, Alabama, Georgia, Carolina del Norte, Mississippi, Ohio y Nueva York. Entre estos grupo de odio, caracterizado por la supremacía blanca, están los Neo-Nazi, Ku Klux Klan, Identidad Cristiana, Neo-Confederados, entre otros. Lo vergonzoso de todo esto es que este un país en donde sabemos que los éxodos inmigratorios han jugado un papel determinante en la formación nacional de lo que conocemos hoy en día como Estados Unidos. Teniendo claro entonces que los prejuicios son explicados por nuestra manera de pensar, sentir y de actuar, entonces es importantísimo que podamos entender que de aquí entonces nos movemos a otra realidad la cual es la manera en que llevamos a cabo una especie de auto-justificación la cual se implementa a través del denigrar a una persona o grupo con la intención de poder intentar excusar el trato inhumano que se le da. Es en esta fase que la discriminación hace su entrada triunfal. Por discriminación entendemos las conductas diferentes y desiguales que se llevan a cabo contra otras personas y/o grupos. En este caso en particular contra las personas inmigrantes, como por ejemplo el no permitirles que tengan acceso a servicios médicos y/o educativos. Cuando tratamos de entender la relación que existe entre prejuicio y discriminación la misma es complementaria y se interrelacionan. O sea, que el prejuicio nos puede llevar a la discriminación y la discriminación al prejuicio. Curiosamente hay en nuestros medios un nuevo concepto de vocabulario que se está utilizando y el cual responde al nombre de etnoviolencia y el mismo lo definen con acciones de intimidación, hostigamiento, insultos, vandalismo, ataques físicos y asesinatos contra inmigrantes. Ya hemos experimentado la manera en que personas racistas han recurrido a los lugares en donde inmigrantes se reagrupan con la intención de poder encontrar trabajos temporeros, por lo general por un día. De estas barbaridades xenofobias Long Island en Nueva York y en el estado de Nueva Jersey hemos sido testigos/as de cómo los medios de comunicación Latinos han reportado los incidentes. Dentro de la llamada utopía realizable yo soy creyente que podemos comenzar a desmantelar todos estos discursos y acciones xenofóbicas y me parece que los medios de comunicación, de la misma manera que han contribuido para reproducirla y defenderla, podrían ser útiles en el desmantelamiento de esta injusticia. Comencemos por reconocer que aquí en Estados Unidos las estadísticas nos dicen que por lo menos existe un televisor por cada habitante que tenemos. Si esto es correcto podríamos decir que tenemos alrededor de unos 300 millones de televisores. La otra estadística nos dice que el núcleo familiar en Estados Unidos pasa alrededor de unas 7 horas diarias frente a la televisión. O sea, que indiscutiblemente este medio de comunicación juega un papel importantísimo en la producción de prejuicios y la justificación de la discriminación. Entonces, ¿por qué no jugar un papel determinante en su desaparición? Para no pecar de ignorante quiero reconocer la existencia de los que estamos identificando como racismo institucionalizado el cual se nutre de todos estos procesos antidemocráticos que hemos discutido. Este es mucho más difícil de identificar y de erradicar que el personal o grupal, pero me complace el reconocer que es posible destruirlo. Lo que necesitamos es una agenda de trabajo de inclusión y participación fundamentada en el reconocimiento, aceptación y celebración de nuestras diferencias. De aquí el que también por otro lado crea que una manera de comenzar a combatir todos estos estragos xenofóbicos lo es a través de la experiencia de poder aprender sobre las diferencias humanas y las convivencias en armonía en donde la unidad garantice la diversidad racial, étnica, religiosa, género, orientación sexual, cultural, etc. Es aquí en donde comenzamos a construir la paz con justicia.
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